Estaba oscuro, las sensaciones venían a verme cogidas de la mano, formando tríadas, triángulos escalenos de amor fugaz y efímero a los que prefería no aferrarme. Tal vez era viernes o puede que solo en mi imaginación, las sombras se fundían conmigo en la pista de baile, sed en muchos aspectos, no tanto en otros, pánico en la discoteca. Una copa de balón, un cierto resquemor. Nadie dijo que aprender a vivir fuese fácil, pero a veces ni una vida llena de tachones es suficiente para. Despertar y notar que algo falta, recapitular, cabrearte. Buscar la sinrazón debajo de las piedras, tratar de entender, de asimilar. Tratar de tragar.
6 may 2011
El de las sombras en la pista de baile.
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